Resolvió una sanción errónea gracias al respaldo legal de onLygal
David es dueño de una empresa de alquiler de veleros. Un día, mientras navegaba tranquilamente con su barco, ocurrió un accidente cerca de su embarcación. Un velero que navegaba en la misma zona, al intentar esquivar un obstáculo en el agua, se desvió de su curso y terminó colisionando con una moto de agua que llevaba a dos chicas. Una de las chicas sufrió lesiones graves causadas por las hélices del velero, mientras que la otra, aunque ilesa, estaba asustada por el impacto.
David, al ver el incidente desde su barco, se apresuró a acercarse al lugar para ofrecer su ayuda y asegurarse de que todo estuviera bajo control. Lo que inicialmente parecía una situación normal de auxilio pronto se complicó cuando llegaron los agentes de la policía. Los oficiales encontraron una escena algo confusa: había dos veleros en la zona, y una moto de agua accidentada. Después de tomar las versiones de todos los implicados, los agentes decidieron imponer una multa a David, el dueño de uno de los veleros, sin tener en cuenta que el velero realmente responsable del accidente era otro, que había navegado demasiado cerca de las motos de agua y no había respetado la distancia de seguridad.
«Me sorprendió mucho que me sancionaran a mí, cuando mi velero no tenía nada que ver con el accidente».
David no podía comprender cómo se le había impuesto una multa por algo que no había causado, y la situación se agravó al darse cuenta de que su aseguradora no cubriría los costes legales, pues la sanción recaía sobre él y no sobre el velero responsable. Ante esta incertidumbre, David decidió contactarse con su seguro legal onLygal. Un equipo de abogados estudiaron todos los detalles del caso. Tras revisar la escena, las declaraciones y las pruebas disponibles, los abogados de onLygal concluyeron que la responsabilidad recaía sobre el otro velero, ya que fue quien invadió el espacio cercano a las motos de agua sin respetar las normativas de seguridad.
«Al principio no entendía cómo la policía podía equivocarse de esa manera, pero felizmente contaba con un seguro legal que me ayudaría a salir de esta situación».
El equipo legal presentó una defensa sólida, demostrando que la sanción había sido mal aplicada. Se comunicaron con las autoridades y lograron que revisaran el caso, retirando finalmente la multa a David. Además, se aseguraron de que las autoridades reconocieran el verdadero culpable del incidente. La policía reconsideró su informe y corrigió la asignación de responsabilidades. El velero causante del accidente fue finalmente señalado como el responsable, y David pudo continuar con su actividad empresarial sin que el incidente afectara su reputación ni su economía.
«Con mi seguro legal pude aclarar el incidente y hacerse justicia. No quiero ni imaginar lo costoso que me hubiera salido solucionar esta situación yo solo».
*Historia inspirada en un caso real de onLygal
