Ayudamos a nuestra clienta a que la tienda devolviera el dinero del televisor dañado.
Mónica estaba emocionada por la compra de un televisor nuevo, pero al llegar a casa y sacar el producto de su caja, se dio cuenta de que tenía un golpe en una esquina y la imagen no se veía bien. Convencida de que el daño había ocurrido en la tienda, recordó que el dependiente había forzado el televisor para meterlo en la caja, algo que pudo haber provocado el golpe. Además, varias personas habían presenciado la escena y las cámaras de seguridad de la tienda podían confirmar lo sucedido.
Primero intentó solucionarlo directamente con la tienda, pero esta negó cualquier responsabilidad, asegurando que el televisor estaba en perfecto estado al entregarlo. Al no obtener respuesta ni solución, Mónica contactó con su seguro onLygal para recibir asesoramiento legal y conocer sus derechos como consumidor.
«Al principio, creí que la tienda asumiría su responsabilidad y me ofrecería una solución rápida, como un cambio de televisor. Pero las cosas no fueron tan sencillas y me di cuenta que necesitaba asesoramiento legal».
Un abogado especializado de onLygal analizó el caso de Mónica y le explicó que, con las pruebas adecuadas, podía reclamar el reembolso del televisor dañado, ya que se trataba de un vicio oculto. El daño no era visible al momento de la compra y había ocurrido durante el proceso de embalaje.
Tras reunir toda la evidencia, incluyendo la grabación de las cámaras de seguridad y testimonios de testigos, el abogado presentó una demanda formal contra la tienda por el total de 700€, el precio del televisor.
«Gracias al asesoramiento legal del abogado de onLygal, pude dar el paso adecuado y recopilar todas las pruebas necesarias para presentar mi reclamación con confianza».
Después de algunos meses de espera, la tienda finalmente no se opuso a la reclamación y consignó el importe completo de los 700€ en el juzgado. Sin mayores complicaciones, Mónica recibió el reembolso, sin tener que asumir ningún coste legal adicional, gracias a su seguro legal.
«Sin el respaldo legal, no hubiera tenido claridad sobre cómo valer mis derechos. Gracias a onLygal, pude recuperar mi dinero y no tuve que pagar nada por los gastos legales».
*Historia inspirada en un caso real de onLygal
