Todo lo que debes saber para reclamar la factura de la luz

Cuando llega la factura de la luz a casa no importa si eres joven o mayor, o si eres más o menos experto en materia de facturas, lo cierto es que entenderla llega a ser realmente difícil por la gran cantidad de datos que aparecen en la misma.

Lo normal es que la factura sea correcta, pero puede haber ocasiones en las que haya algún error que te esté haciendo pagar de más. En estos casos es cuando debes comenzar un proceso de reclamación.

¿Cómo reclamo si hay un error en mi factura?

Los errores en la factura pueden ser de muy diversos tipo. Puede ocurrir que en los datos del titular del contrato de la luz haya alguna errata, pero la causa más habitual de reclamación es que haya un error en la electricidad facturada.

En estos casos la forma más sencilla de solucionar el problema es contactar con el servicio de atención al cliente de la empresa distribuidora y plantear una reclamación.  En la propia factura vas a encontrar los datos de contacto con el canal de atención al cliente.

En la actualidad este tipo de gestiones se suelen llevar a cabo de forma telefónica, pero lo más recomendable es que hagas tu reclamación por medios que certifiquen la fecha, como sería mediante una carta certificada, un burofax o presentación personal con copia sellada.

¿Qué ocurre si la empresa no acepta mi reclamación?

En caso de que la empresa responda a tu reclamación indicándote que no tienes razón, lo que puedes hacer es solicitar la asistencia de la Oficina Municipal de Consumo para que actúe como mediadora. Si de esta forma tampoco se resuelve el conflicto, habrá que acudir entonces a la vía judicial.

Debes tener en cuenta que las reclamaciones tardan algún tiempo en resolverse. Lo más recomendable en estos casos es que aunque no estés de acuerdo con el importe de la factura, lo pagues y luego reclames. Así te evitas posibles problemas de corte de suministro.